En 1929 Federico García Lorca viajó a Nueva York. La gran ciudad, con sus enormes contradicciones, caló profundamente en el alma del poeta andaluz. Un año después veía la luz Poeta en Nueva York, un poemario que es, probablemente, el máximo exponente de la poesía surrealista española.
Uno se sus poemas más conocidos es La aurora de Nueva York:
La aurora de Nueva York tiene
cuatro columnas de cieno
y un huracán de negras palomas
que chapotean las aguas podridas.
La aurora de Nueva York gime
por las inmensas escaleras
buscando entre las aristas
nardos de angustia dibujada.
La aurora llega y nadie la recibe en su boca
porque allí no hay mañana ni esperanza posible.
A veces las monedas en enjambres furiosos
taladran y devoran abandonados niños.
Los primeros que salen comprenden con sus huesos
que no habrá paraíso ni amores deshojados;
saben que van al cieno de números y leyes,
a los juegos sin arte, a sudores sin fruto.
La luz es sepultada por cadenas y ruidos
en impúdico reto de ciencia sin raíces.
Por los barrios hay gentes que vacilan insomnes
como recién salidas de un naufragio de sangre.
Aquí os dejo la interpretación de Enrique Morente, acompañado de Lagartija Nick, de este hermoso poema:
martes, 29 de enero de 2013
sábado, 26 de enero de 2013
viernes, 25 de enero de 2013
Plan de lectura del Departamento de Lengua
Aquí tenéis un adelanto de las lecturas que os propone el departamento para este curso...
martes, 22 de enero de 2013
lunes, 21 de enero de 2013
viernes, 18 de enero de 2013
Hola a todos:
Interesante página sobre J. L. Borges
La biblioteca de Babel, cuento de J.L. Borges
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